¿LA GUERRA EN CIERNES?

¿LA GUERRA EN CIERNES?

Interesados en el cada vez más extendido movimiento, el de la paleodieta, que propugna la necesidad del retorno a los hábitos alimentarios de nuestros antepasados, los hombres y mujeres de las cavernas, recientemente tuvimos noticia de la existencia de un personaje, conocido en los círculos afines como Zeroman y extremista entre extremistas, que lleva a sus últimas consecuencias las tesis de la teoría. Aún más, como ferviente creyente en otra teoría, la de los grupos sanguíneos y la alimentación, teoría que recalca las diferencias biológicas entre los portadores de los distintos grupos sanguíneos, este iluminado vaticina algo parecido a una lucha a muerte entre los grupos sanguíneos que pueblan la tierra.

De cumplirse sus augurios, sería ésta una lucha intestina como ninguna otra, de hermanos contra hermanos y padres y madres contra sus propios hijos, por cuanto las leyes biológicas han hecho de los linajes variadas amalgamas de grupos sanguíneos. De acuerdo con las previsiones de Zeroman, de esa guerra saldrá victorioso el grupo cero y de la mano de esta facción la humanidad involucionará y retrocederá nada menos que al paleolítico, etapa que nunca debió superar.

Reproducimos el mensaje apocalíptico transmitido por Zeroman, tal como él lo ha expresado en diversos foros:

El cambió de ciclo ha comenzado.

Se ha iniciado el proceso involucionario que retrotraerá a Gaia y a la humanidad como parte de ella, al momento -1, al momento anterior al error primigenio, al suceso que provocaría la concatenación inexorable de hechos que condujeron a Gaia y a todas las criaturas vivas de este planeta al borde de su extinción en los albores del siglo XXI, al momento anterior a la domesticación de las especies vegetales y animales, al advenimiento de la agricultura y la ganadería.

A un momento anterior a aquellos en que sendas mutaciones genéticas condujeron, entre otros efectos colaterales, a la aparición en la especie humana de los grupos sánguíneos A y B y, como consecuencia de ello, a la subyugación de la población del grupo 0, menos adaptada a la nueva alimentación y modo de vida.

Fueron aquellos lodos cuáles trajeron para la población del grupo 0 milenios de salud precaria y sufrimiento bajo el yugo de una alimentación y un modo de vida para los cuáles no había sido concebida.

Pero la transición planetaria de la cual todos nosotros somos privilegiados testigos supone el fin del reinado de los poderes hegemónicos, que auguran su fin inminente y en un último acto desesperado ocultan al mundo el colapso definitivo del sistema y la imparable revolución en ciernes.

Zeroman